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La historia de CHI St. Joseph's Children es una historia de mujeres religiosas visionarias que dedicaron sus vidas a responder a las grandes necesidades con un enfoque especial en los pobres, marginados y desatendidos.
La historia de CHI St. Joseph's Children es una historia de mujeres religiosas visionarias que dedicaron sus vidas a responder a las grandes necesidades con un enfoque especial en los pobres, marginados y desatendidos.
En 1865, cuatro Hermanas de la Caridad de Cincinnati viajaron al “lejano oeste”: Santa Fe, en el Territorio de Nuevo México. Hicieron el viaje de 1,400 millas en tren, barco y diligencia, en respuesta a un llamado de ayuda del arzobispo John B. Lamy.
En 1872, la hermana Blandina Segale, de 22 años, viajó sola al oeste, donde trabajaría durante los siguientes 21 años. Primero se detuvo para trabajar en Trinidad, Colorado. La hermana Blandina llegó a Nuevo México en 1877 e inmediatamente comenzó a trabajar para construir un hospital de 3 pisos; el resultado fue el Hospital St. Vincent, el primer hospital construido en el Territorio de Nuevo México.
En 1865, cuatro Hermanas de la Caridad de Cincinnati viajaron al “lejano oeste”: Santa Fe, en el Territorio de Nuevo México. Hicieron el viaje de 1,400 millas en tren, barco y diligencia, en respuesta a un llamado de ayuda del arzobispo John B. Lamy.
En 1872, la hermana Blandina Segale, de 22 años, viajó sola al oeste, donde trabajaría durante los siguientes 21 años. Primero se detuvo para trabajar en Trinidad, Colorado. La hermana Blandina llegó a Nuevo México en 1877 e inmediatamente comenzó a trabajar para construir un hospital de 3 pisos; el resultado fue el Hospital St. Vincent, el primer hospital construido en el Territorio de Nuevo México.
En 1881, la hermana Blandina comenzó una nueva misión en Albuquerque. Our Lady of Angels, la primera escuela pública en Nuevo México, abrió en septiembre de 1881, bajo la dirección de las Hermanas de la Caridad. En 1889, los jesuitas ofrecieron tierras a las Hermanas de la Caridad, sobre las cuales se construyó el Sanatorio St. Joseph. El "San" abrió sus puertas a todos los que necesitaban atención en 1902. A medida que la población de Albuquerque crecía, las Hermanas de la Caridad expandieron su capacidad para satisfacer las necesidades de la creciente comunidad. Las Hermanas de la Caridad abrieron la primera escuela de enfermería, las primeras escuelas para técnicos de laboratorio y de rayos X y el primer banco de sangre en Nuevo México. En 1983, el sistema de salud St. Joseph constaba de 3 hospitales de cuidados intensivos y un hospital de rehabilitación. En 1996, el sistema se convirtió en parte de Catholic Health Initiatives. El sistema hospitalario se vendió en el 2001 y de acuerdo con la visión y el espíritu de las Hermanas de la Caridad y las Iniciativas de Salud Católica, se creó el "Espíritu de innovación - Legado de atención" St. Joseph Community Health. En el 2019, los ministerios de Catholic Health Initiatives y Dignity Health se convirtieron en CommonSpirit Health para facilitar la capacidad colectiva de servir al bien común.
Hoy, CHI St. Joseph's Children es la expresión actual en Nuevo México del ministerio de salud de CommonSpirit Health. Ya no es un hospital ni un proveedor de atención clínica, CHI St. Joseph's Children encarna el legado de las Hermanas de la Caridad de Cincinnati y ejemplifica el espíritu valiente de las Hermanas mientras trabajamos para lograr resultados duraderos al enfocarnos en las necesidades de salud de los más vulnerables de nuestros ciudadanos: los niños de 0 a 3 años.
Como CommonSpirit Health, nuestra misión es dar a conocer la presencia sanadora de Dios en nuestro mundo mejorando la salud de las personas a las que servimos, especialmente aquellos que son vulnerables, mientras avanzamos en la justicia social para todos.
Esta declaración es una declaración formal del propósito de CommonSpirit; una afirmación de por qué existimos. Nuestra declaración de misión tiene sólo 35 palabras, pero hay ideas profundas detrás de ellas.
“Como CommonSpirit Health”, por ejemplo, celebra la unión de dos ministerios de salud influyentes en un ministerio de salud nacional. “Hacemos conocer la presencia sanadora de Dios” es, por supuesto, la razón por la que CommonSpirit existe; es la vocación que nos ha unido a todos. “En nuestro mundo” afirma nuestro compromiso con las personas y las comunidades a escala local, nacional e incluso mundial.
“Mejorar la salud de las personas a las que servimos” se refiere a los aspectos físicos, emocionales y espirituales de las personas a lo largo de todo el proceso de salud. Nos recuerda que servimos a nuestros pacientes, sus familias, nuestras comunidades y también entre nosotros.
“Los que son vulnerables” indica nuestra dedicación a ayudar a las personas que experimentan la fragilidad de la condición humana. Y "promover la justicia social para todos" es nuestro compromiso de aprovechar nuestros talentos y asociaciones en beneficio del bien común y de escuchar y ser transformados por las voces que escuchamos.
En 1881, la hermana Blandina comenzó una nueva misión en Albuquerque. Our Lady of Angels, la primera escuela pública en Nuevo México, abrió en septiembre de 1881, bajo la dirección de las Hermanas de la Caridad. En 1889, los jesuitas ofrecieron tierras a las Hermanas de la Caridad, sobre las cuales se construyó el Sanatorio St. Joseph. El "San" abrió sus puertas a todos los que necesitaban atención en 1902. A medida que la población de Albuquerque crecía, las Hermanas de la Caridad expandieron su capacidad para satisfacer las necesidades de la creciente comunidad. Las Hermanas de la Caridad abrieron la primera escuela de enfermería, las primeras escuelas para técnicos de laboratorio y de rayos X y el primer banco de sangre en Nuevo México. En 1983, el sistema de salud St. Joseph constaba de 3 hospitales de cuidados intensivos y un hospital de rehabilitación. En 1996, el sistema se convirtió en parte de Catholic Health Initiatives. El sistema hospitalario se vendió en el 2001 y de acuerdo con la visión y el espíritu de las Hermanas de la Caridad y las Iniciativas de Salud Católica, se creó el "Espíritu de innovación - Legado de atención" St. Joseph Community Health. En el 2019, los ministerios de Catholic Health Initiatives y Dignity Health se convirtieron en CommonSpirit Health para facilitar la capacidad colectiva de servir al bien común.
Hoy, CHI St. Joseph's Children es la expresión actual en Nuevo México del ministerio de salud de CommonSpirit Health. Ya no es un hospital ni un proveedor de atención clínica, CHI St. Joseph's Children encarna el legado de las Hermanas de la Caridad de Cincinnati y ejemplifica el espíritu valiente de las Hermanas mientras trabajamos para lograr resultados duraderos al enfocarnos en las necesidades de salud de los más vulnerables de nuestros ciudadanos: los niños de 0 a 3 años.
Como CommonSpirit Health, nuestra misión es dar a conocer la presencia sanadora de Dios en nuestro mundo mejorando la salud de las personas a las que servimos, especialmente aquellos que son vulnerables, mientras avanzamos en la justicia social para todos.
Esta declaración es una declaración formal del propósito de CommonSpirit; una afirmación de por qué existimos. Nuestra declaración de misión tiene sólo 35 palabras, pero hay ideas profundas detrás de ellas.
“Como CommonSpirit Health”, por ejemplo, celebra la unión de dos ministerios de salud influyentes en un ministerio de salud nacional. “Hacemos conocer la presencia sanadora de Dios” es, por supuesto, la razón por la que CommonSpirit existe; es la vocación que nos ha unido a todos. “En nuestro mundo” afirma nuestro compromiso con las personas y las comunidades a escala local, nacional e incluso mundial.
“Mejorar la salud de las personas a las que servimos” se refiere a los aspectos físicos, emocionales y espirituales de las personas a lo largo de todo el proceso de salud. Nos recuerda que servimos a nuestros pacientes, sus familias, nuestras comunidades y también entre nosotros.
“Los que son vulnerables” indica nuestra dedicación a ayudar a las personas que experimentan la fragilidad de la condición humana. Y "promover la justicia social para todos" es nuestro compromiso de aprovechar nuestros talentos y asociaciones en beneficio del bien común y de escuchar y ser transformados por las voces que escuchamos.